martes, 26 de mayo de 2015

DESARROLLO MORAL

EL DESARROLLO MORAL

JEAN PIAGET


Para Piaget el desarrollo moral, surge cuando el sujeto interactua socialmente, lo que le permite comprender la moral de manera consciente al igual que regular la practica social. Piaget asocia el desarrollo moral con lo cognitivo, a partir de la observación de los juegos en niños de diferentes edades. 


Propone  tres factores que influyen sobre el desarrollo moral: el desarrollo de la inteligencia, las relaciones entre iguales y la progresiva independencia de la coacción de las normas de los adultos. El primer factor, el desarrollo de la inteligencia, es el más importante, ya que es el que permite a los otros dos actuar. 

Piaget intenta en sus teorías explicar el funcionamiento interno de las estructuras psíquicas. Elaboró en este sentido una teoría del desarrollo y el funcionamiento de la inteligencia, donde defiende la existencia de fases o estadios en el desarrollo de la misma. Estos estadios dependerían  de la maduración biológica del individuo y de la influencia del medio social aportaría  las experiencias adecuadas para aprovechar esta maduración.





Primer estadio: Moral de presión adulta. (2 a los 6 años) los niños son capaces de representar las cosas y las acciones por medio del lenguaje, esto les permite recordar sus acciones y relatar sus intenciones para el futuro. Sin embargo, no pueden aún realizar razonamientos abstractos, por lo que no pueden comprender el significado de las normas generales. Estas normas son, además, exteriores a los niños, impuestas por los adultos, por lo tanto la moral se caracteriza en esta fase de desarrollo por la heteronomía.
Segundo estadio: moral de solidaridad entre iguales. (7 a los 11 años), los niños adquieren la capacidad de realizar operaciones mentales con los objetos que tienen delante. No pueden aún hacer generalizaciones abstractas pero se dan cuenta de la reversibilidad de algunos cambios físicos y de las posibilidades del pensamiento para detectar relaciones entre las cosas. Las normas dejan de ser vistas como cosas reales que tienen su origen en una autoridad absoluta y exterior -los adultos- y comienzan a basarse en el respeto mutuo entre los compañeros de juego, los iguales.
Tercer estadio: moral de equidad. (12 años en adelante) los niños sufren cambios biológicos y psicológicos radicales. Se produce la maduración sexual, pero también una maduración biológica general que potencia el desarrollo intelectual y moral. Los niños, en esta etapa, se convierten en adolescentes y sus estructuras de conocimiento permiten ya las generalizaciones y la realización de operaciones mentales abstractas. Los conceptos se integran en sistemas de proposiciones y se aprende a pasar de lo particular a lo general y de lo general a lo particular.
En esta etapa surgen sentimientos morales personalizados, como la compasión o el altruismo, que exigen la consideración de la situación concreta del otro como un caso particular de la aplicación de las normas.

LAWRENCE KOHLBERG:


Basó su teoría en al proceso lógico el cual según el se pone en marcha cuando los valores adquiridos entran en conflicto (dilema moral), es aquí donde se forma el juicio moral. Postuló  3 niveles del desarrollo moral de acuerdo a las edades del ser humano en las que expone una evolución moral de acuerdo al pensamiento del individuo en cada fase del desarrollo, también resalto que no necesariamente cada individuo desarrolla cada uno de estos niveles, estos niveles son:     
·Moral pre convencional: (4-11años aprox.) Se caracteriza porque las personas actúan bajo controles externos. Obedecen las reglas para evitar castigos y obtener recompensas o por egoísmo.
· Moral convencional: Este nivel de juicio moral generalmente surge a partir de la adolescencia. Es la moral que la mayoría de personas poseen, y consiste en un enfoque desde la perspectiva de uno mismo como miembro de una sociedad, es decir, se tiene en cuenta lo socialmente esperado.
·Moral postconvencional: La persona que llegue a este nivel ve más allá de las normas de su propia comunidad, llegando a los principios en los que se basa cualquier sociedad buena. Muy pocos adultos consiguen tener un juicio pos convencional.
A partir de esto Kohlberg propone  6 estadios continuos de desarrollo moral:
El primer estadio denominado “castigo y obediencia”  se relaciona con el segundo “intercambio instrumental” los cuales hacen parte de una etapa preconvencional de la moralidad  en donde las normas son externas para la persona y solo las toma en cuenta por las consecuencias que puedan traer al no cumplirlas, el castigo seria la razón para hacer el bien en este nivel.
El tercer estadio “Expectativas relaciones y conformidad interpersonal” se vincula con el cuarto “mantenimiento del sistema social” hacen parte del nivel de moralidad convencional en el que la razón para hacer el bien es mantener la regularidad del sistema social.
El quinto estadio “derechos prioritarios y contrato social” está relacionado con el sexto “Principios éticos universales” juntos hacen parte de un nivel de moralidad postconvencional en el que la persona puede asumir como propio un criterio moral, autónomo y vinculado a valores morales absolutos. 




CONDUCTAS AGRESIVAS

AGRESIVIDAD


Según Bandura, Parke y Slaby la agresión es una etiqueta social que aplicamos a actos diversos, el hecho de que apliquemos dicha etiqueta o no a un determinado acto depende del significado que otorguemos al mismo, esto depende de múltiples factores como: las creencias, valores, prejuicios, individuales y sociales.

La consideración de un acto como agresivo puede variar mucho de una cultura a otra, según el momento histórico, etc.
La mayor parte de los autores  entienden por agresión cualquier conducta dirigida a la meta de procurar dolor o dañar de algún modo a otro organismo.

TEORÍAS DE LA CONDUCTA AGRESIVA
Teoría psicoanalítica:
Freud: A partir de 1920, en su última formulación de la teoría de las pulsiones, postuló, junto a las pulsiones de vida -Eros-, la existencia de unas pulsiones de muerte -Thanatos-, radicalmente constitutivas de la naturaleza humana. 
Estas pulsiones poseen un carácter primario, irreductible; no son el fruto derivado de ningún otro tipo de pulsiones previas.



Reich (1972) considera que las tendencias destructivas tienen un carácter secundario, reactivo; surgen como fruto de la frustración de la sexualidad natural. Para Reich el ser humano sería bueno por naturaleza y serían las restricciones impuestas por el principio de realidad las que lo harían agresivo.


Teoría etológica:
Lorenz (1966) sostiene que los seres humanos y los animales poseen un instinto básico de lucha contra los miembros de la propia especie que se activa ante determinados estímulos del ambiente.

La función de esta conducta es la supervivencia de la especie y del individuo.

Según los etólogos, la mayoría de las especies han desarrollado “inhibidores instintivos” de la agresión que evitan que esto ocurra. Pero en la especie humana la muerte a manos de otro se da con demasiada frecuencia. Según Lorenz, ello se debe a que en los humanos el instinto agresivo se halla pobremente controlado. 



Hipótesis de la Frustración-Agresión: 

La frustración  es una sensación que se vincula al impedir que una conducta alcance una meta, siempre produce un tipo de agresión, y que la agresión siempre presupone la frustración.

Lo innato es la relación entre la frustración y la ira. La relación frustración-agresividad es aprendida.
La conducta agresiva no depende únicamente de la disposición a agredir; depende también de determinadas señales “agresivas”. Dichas señales son estímulos asociados con instigadores de la ira actuales o previos.

Esta hipótesis de las señales “agresivas” implica que la exposición a cualquier objeto o evento previamente asociado con algún tipo de agresión -ciertos gestos, armas, situaciones. Ejerce una función de señal y aumenta la probabilidad de intercambios agresivos entre los niños. 

Teoría del aprendizaje social: 

Bandura considera la conducta agresiva como un tipo particular de conducta social que se adquiere y mantiene a través de los mismos procesos que cualquier otra conducta social: el aprendizaje observacional y el refuerzo directo. 

Los hábitos agresivos a menudo persisten porque resultan instrumentales para el logro de determinadas metas, son útiles para parar las conductas dañinas de otros, son socialmente aprobadas por los pares y, por último, intrínsecamente reforzantes para el agresor. 

Bandura acepta que determinados estados internos, como la frustración o la ira, pueden facilitar la agresión, pero no los considera necesarios para que ésta se produzca.  


Teoría del procesamiento de la información social:

La conducta agresiva no depende tanto de las señales sociales presentes en la situación como del modo en que el sujeto las procesa e interpreta.

Una de las  teorías socio-cognitivas más conocidas es la de Dodge,plantea que los sujetos, en una situación social dada, poseen una serie de experiencias previas en su almacén de memoria y unas metas concretas (divertirse, hacer amigos, no crearse problemas inútilmente...). En dicha situación, la conducta del sujeto ante la señal social va a depender de cinco “pasos” o procesos cognitivos.
  1. Descodificación de la señal.
  2. Interpretación.
  3. Búsqueda de respuesta.
  4. Una decisión acerca de la respuesta
  5. Codificación en la que el sujeto lleva a cabo la respuesta elegida.

AGRESIÓN EN ESCOLARES

Trabajos como el de Caplan y colaboradores (1991) sugieren que los niños, ya a partir del primer año, cuando tratan de quitar a otro un objeto que les interesa, tratan a ese otro más como un adversario que como un simple obstáculo inanimado. Por lo que respecta a la segunda cuestión, la respuesta no es fácil, pues las conductas agresivas de los niños de 1 año no son comparables con las de los niños de 7 o las de los adolescentes. En este sentido lo que se puede analizar y ha sido estudiado son los cambios en el tipo de conductas agresivas y en las situaciones que las elicitan. 
 La agresión durante los años preescolares

 Los estudios sobre la agresión durante los años preescolares son más bien escasos. Entre ellos, hay que destacar los de Goodenough (1931), Hartup (1974), Cummings y colaboradores (1989) y  Caplan y colaboradores (1991). A partir de los mismos, se ha llegado a las siguientes conclusiones:
• Las rabietas relativamente no focalizadas, a menudo provocadas por molestias en las rutinas diarias, como la comida o el baño, disminuyen durante el período preescolar; a partir de los 4 años, estos arrebatos de ira tienden a focalizarse en personas específicas, especialmente en los compañeros de juego.

En cuanto a los elementos que elicitan la agresión, mientras que a los 2-3 años las conductas agresivas se dan sobre todo en respuesta a frustraciones derivadas del ejercicio de la autoridad por parte de los padres, posteriormente son más frecuentes tras conflictos con los pares. Los conflictos con éstos por la posesión de un juguete se dan incluso cuando los niños tienen a mano otro igual.
 
• La forma que toma la agresión también cambia: mientras que a los 2-3 años la mayor parte de las agresiones son de carácter instrumental (el objetivo es conseguir algo deseado, más que infligir un daño a otro) y los niños tienden a golpear y dar patadas, posteriormente, aunque continúan peleándose por los objetos, su agresión es cada vez de carácter menos instrumental y más hostil, muestran cada vez menos agresión física y tienden más a la burla, a llamar al otro cosas que saben que le molestan, etc. La tendencia a vengarse en respuesta a un ataque o frustración aumenta claramente a partir de los 3 años. 


AGRESION EN ADOLESCENTES
La agresión y la conducta antisocial en los preadolescentes y adolescentes. 

 Parece que la agresividad hostil y física alcanza su punto álgido a comienzos de la adolescencia y luego declina (Loeber, 1982; Cairns et al. 1989). Sin embargo, en la medida en que los adolescentes son más fuertes y, al menos en algunos países, tienen fácil acceso a muchas armas, sus agresiones tienen efectos mucho más desastrosos. Ello explica en parte el que los arrestos por asalto y otros delitos violentos aumenten considerablemente en la adolescencia (Cairns et al. 1989). 
 Por otra parte, aunque las agresiones disminuyan, no lo hacen otras conductas tales como el ostracismo social  (la maledicencia y la exclusión de otros), los robos, los novillos, etc... Para algunos autores, esto significa que los adolescentes tenderían a expresar su ira y hostilidad de una forma menos abiertamenteagresiva y más encubierta (Shaffer, 1994). 



DIFERENCIAS DE GENERO
Diferencias sexuales en conductas agresivas  
 
Numerosos estudios sobre diferencias sexuales en conducta agresiva, llevados a cabo
en muy diversos países, constatan que los varones son más agresivos que las mujeres, no sólo físicamente, sino también verbalmente (Hyde, 1984; Whiting y Edwards, 1988). Asimismo, la probabilidad de ser objeto de agresión es mayor en los varones: se ha comprobado que los conflictos son más probables entre díadas de chico y chico que entre chico-chica o chica-chica
(Barret, 1979). Veamos las diversas explicaciones que se han propuesto acerca de estas diferencias. 

La explicación biológica

 Maccoby y Jacklin (1980), claramente posicionadas a favor  de esta explicación, plantean que existen cuatro importantes argumentos para defender una fuerte base biológica en tales diferencias: 
1) Los varones son más agresivos que las mujeres en casi todas las sociedades que han sido estudiadas. 
2) Las diferencias sexuales en agresión aparecen muy tempranamente (para los 2-21/2 años). 
3) Los machos tienden a ser también el sexo más agresivo entre nuestros parientes filogenéticamente más próximos.
 4) Finalmente, existe evidencia de una relación estrecha -tanto en humanos como en animales- entre hormonas masculinas y conducta agresiva. 

La explicación social

Desde esta perspectiva, se ha señalado que la mayor concentración de hormonas sexuales masculinas en los sujetos que muestran una conducta agresiva puede ser tanto causa como efecto de dicha conducta. Asimismo, se ha señalado que no está claro que los niños muy pequeños sean más agresivos que las niñas. En un interesante estudio de Caplan y colaboradores (1991) se encontró que las interacciones agresivas para resolver los conflictos que surgían en torno a los juguetes eran más numerosas cuando los grupos de juego estaban dominados por niñas.  

La explicación interactiva

Desde este punto de vista, las diferencias sexuales en agresión derivan de una interacción compleja entre diversos factores biológicos ligados al sexo y diversos factores sociales. Las niñas tienden a madurar antes, a hablar antes y a ser más sensibles al dolor que los niños, mientras que éstos tienden a ser más grandes y musculosos, a dormir menos y a ser algo más activos, irritables y difíciles de consolar que las niñas. 
FACTORES DE SOCIALIZACION QUE INFLUYEN EN EL DESARROLLO DE LAS CONDUCTAS AGRESIVAS  

Los estudios transculturales muestran de forma consistente que ciertas sociedades y subculturas son más agresivas y violentas que otras.  Las diferencias de clase son también claras: los niños y adolescentes de clase baja, en especial los varones de las grandes zonas urbanas, muestran más conductas agresivas y mayores niveles de delincuencia que los de clase media. 

Problemática económica y social

conlleva el pertenecer a los sectores más desvaforecidos de la sociedad. Junto a problemas de paro, dificultades económicas y emocionales en el seno de la familia, déficit de escolarización, etc., ha de tenerse en cuenta la sensación de frustración o “deprivación relativa” provocada por la continua seducción consumista a la que -muy especialmente- los niños y los jóvenes se ven continuamente sometidos en la sociedad occidental.   

 Los niños que viven en la calle, que son cuidados en instituciones o reformatorios con
cambios frecuentes de cuidadores o que son objeto de malos tratos carecen de modelos
adultos para comportarse adecuadamente y tienen dificultades para establecer lazos 
afectivos.




 PATTERSON

 (1982; Patterson et al., 1989) ha estudiado las interacciones entre padres e
hijos que se dan en las familias que tienen, al menos, un niño altamente agresivo,
ha encontrado que el ambiente de las primeras familias es muy particular: sus miembros se pelean de continuo, son reacios a comenzar cualquier conversación y, cuando charlan, tienden a amenazar, insultar y meterse  con los otros miembros de la familia. Patterson habla de ambientes familiares coercitivos ,  señalando que, en tales familias, una gran cantidad de interacciones se reducen a esfuerzos,  por parte de uno de sus miembros, para que otro deje de molestarle. El refuerzo negativo  juega aquí un importante papel: los miembros de estas familias pronto aprenden que, cuando  otro les molesta, si le gritan, le insultan o le pegan, acabará dejando de molestarles.  




 Según el modelo del desarrollo de la conducta antisocial crónica de Patterson, este ambiente contribuye al desarrollo de conductas agresivas y desafiantes y al sesgo atribucional de hostilidad, lo que favorece tanto el rechazo por parte de los compañeros como el fracaso académico. Ello, a su vez,  puede hacer que los padres se desentiendan cada vez más de su hijo y se despreocupen de lo que éste hace o deja de hacer. Y los adolescentes con estos problemas tienden a juntarse entre sí, formando grupos que tienden a devaluar lo académico, valoran e instigan comportamientos agresivos, y promueven conductas disfuncionales de todo tipo. En definitiva, para Patterson, la experiencia de los niños en este tipo de ambientes a menudo constituye un primer paso crucial en la senda de la conducta antisocial crónica.



TEMPERAMENTO


EL TEMPERAMENTO

“Conjunto de características innatas de la personalidad regulada por factores constitucionales.”

El temperamento se ha definido como la predisposición emocional congénita, la manera básica de como un individuo se enfrenta y reacciona ante una situación determinada. El temperamento constituye la tendencia del individuo a reaccionar de cierto modo ante su ambiente. Se trata de diferencias innatas y reconocibles desde el momento del nacimiento. Es el estilo conductual o la reactividad emocional que manifiesta un niño cuando interactúa con el ambiente. 

Galeno propuso la teoría de los cuatro temperamentos: 

• Melancólico: El melancólico es el más rico y complejo de todos los temperamentos.Suele producir tipos analíticos, abnegados, dotados y perfeccionistas. Es de una naturaleza emocional muy sensible, predispuesta a veces a la depresión.
• Flemático: Es un individuo calmoso, tranquilo, que nunca se descompone y  casi nunca se enfada.es frío y se toma su tiempo para la toma de decisiones..
• Sanguíneo: Se trata de una persona cálida, campante, vivaz y que disfruta de la vida.Es receptiva por naturaleza Tiende a tomar decisiones basándose en los sentimientos más que en la reflexión.
• Colérico: Es caluroso, rápido, activo, práctico, voluntarioso, auto suficiente y muy independiente. Es extrovertido.  No necesita ser estimulado por su ambiente, sino que más bien lo estimula él con sus inacabables ideas, planes, metas y ambiciones.





TEMPERAMENTO Y PERSONALIDAD
Para hablar de temperamento es necesario definir que es la personalidad. 
La personalidad, para Cloninger es la organización dinámica de los diferentes sistemas psicobiologicos del individuo, lo que le permite modular la adaptación de la persona que la experiencia.


TEMPERAMENTO Y CARÁCTER

El temperamento y carácter forman parte del mismo proceso de aprendizaje. El carácter es el fruto de la experiencia y representa el modo como el individuo interpreta las respuestas a los estímulos intrapsiquicos o a los provenientes del medio que lo rodea.


El temperamento es escasamente heredado y está influido por el aprendizaje sociocultural. Pero el carácter tiene capacidad para modificar el temperamento permitiendo al individuo aprovechar lo útil y amortiguar las tendencias biológicas o los instintos menos deseables.



DIFERENCIAS ENTRE TEMPERAMENTO Y CARÁCTER


TEMPERAMENTO + CARÁCTER = PERSONALIDAD


TEMPERAMENTO EN EL NIÑO 

Constituye una variable individual, contiene 3 tipos temperamentales de estilo para adaptarse a la vida. 

  1. El niño fácil: Es un niño pacífico y de humor positivo, accesible, aceptable y rítmico.
  2. El niño difícil: Es un niño que tiene humor predominantemente negativo y fuerte, presenta dificultades adaptativas y es arrítmico.
  3. El niño de puesta en marcha: Niños con poca actividad, accesibilidad y adaptabilidad y con ritmo variable aunque tendente a negativo.

Dimensiones clásicas del temperamento del niño
• Nivel de actividad 
• Ritmicidad 
• Acercamiento o alejamiento ante situaciones nuevas 
• Adaptabilidad 
• Umbral de responsividad 
• Intensidad de reacción 
• Calidad del humor 
• Distraibilidad 
• Campo y persistencia de la atención.


La evaluación del temperamento según Cloninger se basa en cuatro mecanismos psicobiologicos de adaptación al entorno que se corresponden con cuatro dimensiones basadas en predisposiciones emocionales estables a lo largo del desarrollo.


• Búsqueda de lo novedoso: se describe como la tendencia a responder activamente ante estímulos nuevos, hay un aumento de la actividad exploratoria ante estímulos novedosos, impulsividad en la toma de decisiones. 

• Evitación del peligro: la tendencia a inhibir estímulos que despiertan aversión de conductas como la preocupación ante la anticipación de futuros problemas, comportamiento evitativo.

• Dependencia de la recompensa: se describe como la capacidad de resistir la extinción de un comportamiento o el mantenimiento de este hay sentimentalismo, apego social y dependencia de la aprobación exterior. 

• Perseverancia: estaba pensado como un componente de dependencia a la recompensa y fue medido en términos de perseverancia frente a la frustración y fatiga.


TEMPERAMENTO Y GENÉTICA
Existe una heredabilidad próxima al 50% en lo que se refiere a las variaciones del temperamento. Ademas sobre la genética influyen las emociones y el mismo proceso de desarrollo. El temperamento no esta influido por el aprendizaje sociocultual. 

FACTORES QUE INFLUYEN EN EL TEMPERAMENTO:
  • La ansiedad y estrés de la madre durante el embarazo se asocian con problemas de conducta en la primera infancia.
  • El consumo de sustancias en la madre, peor interacción entre la madre y el hijo y genera angustia lactante.
  • Historia materna de malos tratos y la psicopatologia con relación madre-hijo
  • Historia de depresión de la madre



INFOGRAFIA 
http://moodle.uptc.edu.co/moodle_presencial/file.php/1247/tres_teorias_del_desarrollo_del_juicio_moral.pdf

http://moodle.uptc.edu.co/moodle_presencial/file.php/1247/Desarrollo_altruismo_y_agresion_1_.pdf

http://www.monografias.com/trabajos75/temperamentos-sanguineo-flematico-melancolico-colerico/temperamentos-sanguineo-flematico-melancolico-colerico.shtml

http://moodle.uptc.edu.co/moodle_presencial/file.php/1247/Algunos_predictores_de_la_conducta.pdf

http://moodle.uptc.edu.co/moodle_presencial/file.php/1247/1-s2.0-S169628181070041X-main.pdf

http://www.paidopsiquiatria.cat/files/modulo-7_temperamento.pdf






REALIZADO POR:

MABEL MORALES
ANDREA MUÑOZ
WENDY RODRIGUEZ